PET SHOP BOYS - ACTUALLY


Disco publicado en septiembre de 1987

El synth pop fue género dominante en los ochenta. Los teclados se apoderaron de la pista de baile, la radio y los videoclips de MTV. Junto al hair rock fueron tal vez los movimientos musicales más influyentes de la década. Erasure, O.M.D., Human League, Yazoo, fueron algunos abanderados del mar de teclados que invadió listados. Pero quienes comulgaron con el pop de modo sofisticado y lograron establecerse con más comodidad a los dos lados del Atlántico fueron Pet Shop Boys y su segundo disco, Actually.

                    

El dúo británico de Neil Tennant y Chris Lowe tenía un precedente delicioso con canciones como "West End Girls" y "Suburbia" lanzados en 1986. Tenían un agregado especial en el manejo de los teclados entre la refinación y el fácil acceso, y un componente vocal único en Tennant. Entre aquellas ligerezas auditivas que parecían venir en su segundo disco se escondían subtextos de crítica al materialismo, prostitución, SIDA y al régimen de Margaret Thatcher, todo bajo dulzuras sintéticas.

Actually fue una fábrica de éxitos. La educación rígida y dogmática de Tennant lo llevaron a componer "It's a Sin", una convergencia entre evocaciones de música sacra y teclados de pop desesperado, #1 en Reino Unido y un primer campanazo a las libertades individuales por parte del dúo.  Luego vino el afortunado dueto con Dusty Springfield "What have I done to Deserve this?",  con la artista en franca recuperación musical y un pop dulce sobre una contienda de amor no recíproco. Fue #2 en Inglaterra y EEUU.

Pet Shop Boys y Dusty Springfield, dueto sobre ruedas.
La tercera salida comercial fue "Rent", distinguidos teclados envueltos en candidez que parecieran hablar de un vividor aprovechado, pero finalmente es una reflexión sobre el materialismo y el amor por el lujo. Este tópico también se toca en "Shopping" entre teclas metálicas, 'I heard it in the house of the Commons /Everything's for sale'. Aquel ambiente de codiciosa luz contrasta con el sector deprimido de "King's Cross", donde el desempleo, la prostitución y el SIDA son el complemento a un ambiente británico sin salida que no revelaba el gobierno de Thatcher. Teclados suaves para palabras duras.

En general es un album bailable, con cicatrices líricas camufladas, pero irremediablemente entregado al pop. "One more Chance" es baile nocturno en New York inspirado en Divine (Pink Flamingos) y un sabor innegable a teclados ochenteros. "Heart" es su pop estelar, de letra ligera y cursilería fácil, elevado a una alta expresión musical. "Hit music" es pura actividad física de zapato inquieto, con un cierre ambient que nos recuerda la omnipresente sofisticación del dúo.

Synth pop de alta competencia. Y suena fresco aún. Suena Actually.




GRAN TRACK. Es una canción netamente pop, pero le sobra exquisitez. "Heart" es una declaración de amor simple, con unos teclados despiertos, aplastantes y el espíritu de los 80s inherente.

MAL TRACK. No está mal hecha. Es ambiental, melancólica, orquestal y hasta profunda. Apellidos como Morricone y Badalamenti la rodean. Pero "It couldn't happen Here" no navega en el mismo barco del Actually. Tal vez en otro disco.


Comentarios